VIAJE A FLORENCIA

Como ya sabéis algunos de los que me seguís en mis redes sociales el pasado mes de Abril con motivo de la celebración de mis 40 años, hice un viaje a Florencia con mi hermana y mi madre. Me voy a ceñir solamente en lo que a su gastronomía se refiere.

La primera noche cenamos en el restaurante Santa Felicita (Piazza di Santa Felicita), nada mas cruzar el puente Vechio. El sitio nos agradó mucho, no tiene demasiadas mesas dentro y si hace bueno puedes comer o cenar en la terraza. Teníamos ganas de comer pizza, así que esa fue nuestra opción.

Una para cada una y una ensalada para compartir. Vinito blanco y refresco y sin postre. El precio muy asequible para donde estábamos. Creo que no llegó a los 50 €. Nos llamó la atención los 6€, 2€ por cubierto, que te cobran así sin mas, pero posteriormente ya vimos que era en todos los restaurantes.



Durante el día decidimos no parar demasiado a comer, ya que desayunábamos bastante fuerte en el hotel


y con una porción de pizza nos era suficiente. Por toda Florencia hay donde comprarlas:



La siguiente noche nos decidimos por cenar en alguna de las tratorías que habíamos visto en la plaza Santi Espíritu, en concreto nos decantamos por la Tratoria Borgo Antico. Estaba muy concurrida pero conseguimos mesa. Esta vez pudimos cenar fuera ya que la noche era mas apacible que la anterior. Risotto, plato de pasta y ensalada. Vino y postres. También buenísimo y un precio como la noche anterior.



AL día siguiente nuestra opción para comer fue de bocadillo. Yo llevaba dos sitios emblemáticos para comprarlos, ambos en la calle Vía de Neri. El primero estaba a rebosar, una cola enorme que ocupaba media calle así que nos decantamos por el segundo que yo tenia: La Prosciutteria, todo un acierto desde luego. Nos tomamos un bocadillo de carne Agnus, aceite de trufa, salsa de ricotta y hierbas y flor de sal, regado con un vino blanco de la casa. Espectacular!!!


La ultima noche, erramos un poco en la elección, así que por eso no os cuento nada.